La faena de hacienda vacuna continuó retrocediendo en términos mensuales

En septiembre de 2023 la faena de hacienda vacuna continuó retrocediendo en términos mensuales, al tiempo que, por primera vez en diecisiete meses, arrojó una caída en la comparación interanual.

La faena total se ubicó en 1,158 millones de cabezas de hacienda vacuna en el noveno mes del año.
En términos absolutos fue la faena de novillitos la que más disminuyó (-52,7 mil cabezas; -9,7% anual), explicando 65,0% de la contracción total de la faena de machos en el último año. Esto hace que el precio del consumo liviano aumente y no retroceda, a pesar de la baja disposición de los consumidores a convalidar las subas generales de precios.

En cambio, en septiembre continuó creciendo la faena de hembras. El total faenado fue 10,4% mayor al de septiembre de 2022 (+53,6 mil cabezas). Fue la creciente faena de vacas la que explicó casi todo el incremento de la faena de hembras (91,9% del total; +25,6% anual).

En función de lo analizado, la participación de las hembras en la faena total ascendió a 49,1% en septiembre de 2023. En consecuencia, ya se cumplieron seis meses en los cuales la faena de hembras en relación a la faena total se ubicó por encima del límite superior del intervalo que resulta consistente con el mantenimiento del rodeo vacuno.

¿Liquidación de vientres?
La faena de hembras sumó 5,275 millones de cabezas en los primeros nueve meses de 2023 y resultó 15,7% superior a la de igual período de 2022 (+717,5 mil cabezas). Casi 60% del crecimiento de la faena de hembras se debió a la mayor faena de vacas. En tanto, la faena de vaquillonas explicó el restante 40%.
Con estos guarismos, en enero-septiembre del corriente año la participación de las hembras en la faena total llegó a 47,9% (+2,5 puntos porcentuales interanuales). Nuevamente, quedó ubicado por encima del límite superior del intervalo que consistente con el sostenimiento de las existencias bovinas.


En lo que respecta a la producción de carne vacuna, en septiembre fue equivalente a 266 mil toneladas res con hueso (tn r/c/h). El peso promedio en gancho subió de 226 a 229 kilos entre agosto y septiembre, pero en relación a septiembre de 2022 experimentó una caída de 2,9% (-7 kilos).

En los últimos tres meses la caída sistemática de la faena de hacienda vacuna provocó la retracción de la producción de carne. Estimando exportaciones de carne vacuna equivalentes a 82.300 tn r/c/h de carne vacuna mensuales (90 mil tn r/c/h equivalentes en los últimos tres meses), en enero-septiembre de 2023 se habrían enviado al exterior 741 mil tn r/c/h de carne vacuna, un total 9,9% mayor al de los primeros nueve meses de 2022 (+66,67 mil tn r/c/h).

De esta forma, en el período considerado el consumo aparente de carne vacuna en nuestro país habría ascendido a 1,753 millones de tn r/c/h, superando en 5,6% al verificado en enero-septiembre del año pasado.

En septiembre de 2023 el promedio móvil de los últimos doce meses del consumo aparente de carne vacuna se ubicó en 50,4 kg/hab/año, ubicándose 3,7% por encima de la cantidad registrada en septiembre del año pasado (+1,8 kg/hab/año).

En septiembre el alza de precios al consumidor en el Gran Buenos Aires igualó a la suba de agosto (12,2% mensual) y de esta manera el ajuste del tipo de cambio oficial post PASO ya se trasladó totalmente a los precios domésticos. Tal como establecimos en el Informe anterior, la decisión de aumentar la cotización en pesos del tipo de cambio oficial en ausencia de un plan consistente, no podía lograr ningún efecto positivo sobre el tipo de cambio real de corto plazo

Entre agosto y septiembre del corriente año el capítulo alimentos y bebidas no alcohólicas registró un incremento de 13,2%. En el caso particular de la carne vacuna, el ajuste del precio promedio nuevamente superó a los indicadores generales, ubicándose en 16,2% mensual (en el caso de la hacienda en pie, el precio promedio registró una suba de 3,9% mensual).

De esta forma, entre septiembre de 2022 y septiembre de 2023 el precio promedio de los cortes de carne vacuna que releva el INDEC subió 12,9% en relación al nivel general del IPC. Y cuando se lo contrasta con el precio del pollo entero, la suba fue de 8,4%.

Al comparar con febrero de 2020, que fue el mes anterior al inicio de la ‘cuarentena’, el nivel general del IPC del GBA acumuló una suba de 672,4% (+7,7 veces) y el precio promedio de los cortes vacunos medidos por organismo oficial de estadísticas aumentó 844,2% (+9,4 veces).